jueves, 20 de mayo de 2010

Planes para el fin de semana

Jueves primaveral. En la antesala del fin de semana hoy haremos un repaso de algunas de las opciones de las que podemos disfrutar este fin de semana.

A partir de mayo se llena el calendario y me encanta. Si tenéis más propuestas, contadnos por favor.

¡A pasarlo bien!

martes, 18 de mayo de 2010

IN MEMORIAM


Estamos en los ochenta, y los niños del baby boom somos quinceañeros. Empezamos a salir en cuadrillas. Punto de encuentro, la calle Santa María. Esta calle no era como es ahora, aunque el paisaje arquitectónico no ha cambiado tanto, el paisaje humano sí. Actualmente es una calle bastante vacía, antes no había un hueco libre.

Creo que el movimiento de la gente en la calle visto desde arriba debía ser como las aguas de un río. Grupos de gente que se encaminan hacia un lado, otros grupos hacia otro…
Y ahí, arriba de la calle había un local mítico; el Guay. Adornado con fotos del propio dueño tomadas en su época de boxeador.

Luis Aisa era el Guay, y junto con su mujer Aurori reinaba a en la barra. El Guay además conseguía reinar en el bar entero.

Comenzábamos asomándonos a la puerta, desde la cual se divisaba una estupenda panorámica de casi todo el bar, y gritábamos “Ese Guay”. Nos devolvía el saludo, incluso salía de la barra para hacer amago de soltar unos derechazos a alguno. Si había demasiada gente como para salir, nos lanzaba los iturris de las cervezas, con la sana intención de darnos un cocorotazo. Partida de futbolín, en la que, si el trabajo se lo permitía jaleaba como si estuviese delante del mismísimo Athletic…

Buen ambiente. El Guay era guay. Visto con la perspectiva del tiempo me doy cuenta de que nos cuidaba. Con las chicas, si algún chico se ponía pelma, enseguida salía y le ponía firme al colega “Déjale a la chavala que te voy a…” Siempre con una sonrisa, un saludo. Siempre insistiendo “tú no te metas nunca, que no me entere yo de que te metes, esa mierda mata” Creo que le he prometido más veces al Guay que a mis propios padres no iba a drogarme.

Se ha ido con 68 años. Hay al menos una generación de mi pueblo que nos hemos quedado un poco huérfanos con su marcha. Y quiero aprovechar esta oportunidad para decirle: Luis, muchos te hicimos caso y no nos metimos esa mierda. Gracias por todo.

Acto de despedida para familiares y amigos mañana miércoles a las 18:00 h en el tanatorio de Portugalete.

Goian bego